domingo, 17 de mayo de 2015

¿Y si a los lectores no les importara el futuro del periodismo?

Casi coinciden en el tiempo sendas reflexiones de los dos periódicos más importantes en España -El Mundo y El Pais- sobre la transformación digital de sus medios y, más allá, del periodismo. Por un lado, el presidente de Unidad Editorial, Antonio Fernández-Galiano, afirma que los profesionales de la información van a "tener que ser tecnólogos"; por otro, Antonio Caño, director de El Pais, dice que hay que "apostar por el vídeo, por el móvil, por la incorporación de nuevos espacios informativos que atraigan a nuevos lectores a la web, por la distribución de contenidos a través de redes sociales".

Haciendo click en la imagen podéis acceder a una
presentación de Unidad Editorial sobre la "revolución"
de los medios de información
Todo ello nos hace pensar que, aunque quizás con cierto retraso, los grandes medios se han decidido por fin a dar el salto digital. Todo es alegría y alboroto alrededor de la innovación en internet, que obliga también a cambiar fondo y forma del papel declinante, hasta que llegan los lectores con ganas de opinar y decidir...y no tantas ganas de pagar.

Y resulta que El Mundo, que tanto ha reflexionado sobre los diseños y rediseños de su "home", se da cuenta de que solo el 5% de los lectores pincha en más de 20 noticias al mes en su portada digital. Que la mayoría accede al contenido por otras vías, como son las recomendaciones a través de redes sociales que llegan a su smartphone

Y resulta que El Pais, después de dar mil vueltas a la nueva maquetación del periódico de papel, recibe un aluvión de quejas relacionadas con -agárrense- la reducción de la información sobre la parrilla televisiva o la posible supresión del crucigrama del domingo.

Tanto reflexionar sobre cómo ofrecer a los lectores la información más interesante con el mejor envoltorio posible, en los distintos soportes de lectura, para que lo que más les interese sea acertar el contenido de unas casillas dispuestas en sentido vertical y horizontal. O, en la web, ver fotografías de traseros.   

Claro, que estos disgustos llegan por dejar opinar a los lectores, ¿pero qué se habrán creído? Ah, que digo yo que a lo mejor se les podría haber dejado opinar antes o, incluso, poder participar del futuro del periodismo con algo más que su dinero o sus "clicks". 

Aunque es posible que ese futuro no les interese lo más mínimo, pues bastante tienen con preocuparse por el suyo y el de sus hijos.